Respirando…

Esperas a deshoras,
encuentros, a tiempo.
Así son las paradojas coetáneas al devenir del ser humano.
Rumores en los parques, de hojas mecidas, de otoño regenerador.
Murmullos cálidos en los cafés de tertulias, de esperas encontradas.
Esperas innecesarias, encuentros acertados.
Correctos y certeros, mientras me estremezco por la sorpresa que ya anida en mí,
como calor del águila, situada en las alturas.
como cubil inscrito en horizonte sin fronteras,
como alma que brilla libre, pausada, avivada,…
Viva… respirando y absorbiendo la vida…
© Roberto Sastre Quintano.
Madrid, 03/10/2017