Hojas al viento
La vida enseña a observar las hojas de otoño
en su vuelo grácil, formando óvalos, curvas, ondulaciones en el aire que dan forma a los momentos…
La vida enseña a bailarlas,
sin agarrarlas, sin poseerlas, contorneándolas de serpentines al ritmo de las manos, de su calor sin contacto, a distancia justa que transmite el calor vital.
La vida, que muestra múltiples hojas danzando, cada una con sus ritmos, texturas, vientos y…
cada una requiere su propio cuidado.
Con atención y ternura.
Con respeto y escucha.
Roberto Sastre Quintano.
Madrid, 16/07/2019