Nieve
Miro con los ojos del alma… Caen copos, de Nieve.
Pausados, rítmicos, neutrales a la vida.
Caen.
Percibiéndolos, lentamente.
Capa tras capa se van depositando, cuajando,
en formas a las que los pequeños dan vida modelando
bolas de nieve
muñecos de nieve
Calados de Nieve.
Un frío que no cala bajo la felicidad de las carcajadas
capaces de quebrar el hielo
o sublimar corazones helados o dispersos.
Contrastes y… una ruptura:
Del frío exterior, al calor interior.
Así es como nos calentamos en nuestro hogar, a la lumbre del gozo.
© Roberto Sastre Quintano.
Madrid, 06/02/2018.