Diálogos sobre la importancia
Persona A: ¡Qué bonito tránsito hacia el crecimiento interior…! No hay nada más importante en la vida que el maravilloso viaje de descubrir esto.
Persona B: Recuerda que cada uno somos un mundo. Hay personas que, para ellos, el centro de su vida es el fútbol, para otros el no poder vivir si no es el ir de tiendas… la transcendencia personal es una opción, como cualquiera de las otras que cada persona manifiesta…
Cada persona se siente afortunada (o no) con lo que ocurre en su vida y en su propio camino…
Persona A: Quizá nos toque hacer a otros de guía…
Persona B: O no. Tanto si lo es como si no, no es importante. Será nuestra opción elegida, humildemente y sin ninguna importancia. Y eso nos llenará si elegimos o nos damos cuenta de que nuestro interior nos pide que caminemos por ahí.
Persona A: Por eso primero nos toca transitar estos caminos de descubrimiento interior conscientes de que es lo que nos ofrece el sentido de vivir.
Persona B: Sí, la experiencia nos va trayendo respuestas.
A mí, me está ayudando mucho en este último mes, sobre todo a discernir. Esto sí, esto no, lo otro tal vez…
Persona A: Eso me falta a mí… humildad… y me sobra ego.
Persona B: Es importante no darse importancia a uno (que no tiene nada que ver con no valorarse). Es mantener a raya al ego del que hablas.
Nuestra vida simplemente es. No tiene ninguna importancia. Sólo es importante nuestro propio camino, el ir sintiéndose uno a gusto con nuestro propio descubrimiento (y eso, seguro que trae muchas cosas importantes para nosotros mismos y para los demás)… Partiendo de la humildad…
Persona A: ¿Qué es para ti lo que equilibra al ego…? ¿La humildad?
Persona B: La humildad bombardea al ego, como poco. Le quita toda la fuerza, que no lo anula, porque no hay que anular nada, sólo poner cada cosa en su sitio para que nuestra mente y Ser puedan desarrollarse en equilibrio, en paz. Pienso.
(C) Roberto Sastre Quintano.
Madrid, 11/10/2017